APOYOS, ¿DENTRO O FUERA DEL AULA?

Al querer profundizar sobre este tema en concreto, acudí en primer lugar a mi "profe" de cabecera: mi madre, que tras 26 años ya como docente en el Colegio Público Valverde y Perales de Baena, ha dado luz a mi humilde y poca experiencia acerca de las ventajas e inconvenientes que supone el apoyo al alumnado dentro o fuera del aula.

Su primera reflexión ha sido: << El apoyo no es mejor o peor dentro o fuera del aula en todos los casos. Depende del grado y del tipo de dificultad del alumno que se trate>>. Esta afirmación me parece clave a la hora de abordar el tema del apoyo escolar, ya que desde una visión utópica siempre va a ser deseada la integración de todos los alumnos como un conjunto, pero cada estudiante a su vez, tiene sus circunstancias y puede que no valga el mismo tipo de atención para unos y otros. Que el apoyo se realice dentro de la clase es postivo porque ayuda al alumno con necesidades a normalizar su situación con respecto a los demás, a integrarse e incluso a llevar dentro de sus posibilidades un ritmo similar al de sus compañeros. Bajo mi punto de vista, a nivel de legislación o inspección creo que lo que se intenta es introducir el máximo de horas de integración del niño con necesidad de apoyo en la clase; sin embargo, creo que esto es demasiado idílico y que existen otro tipo de factores que dificultan que el apoyo en clase pueda realizarse de forma adecuada.


Como he dicho anteriormente, el alumno puede tener problemas individuales, como por ejemplo: dificultades de lenguaje, transtornos en el desarrollo, discapacidad visual o auditiva, etc, que pueden dificultar el desarrollo normal de la clase y perjudicar su propio avance y el de sus compañeros. Cuando se habla de apoyo no siempre se hace referencia a alumnos que tienen problemas con una materia en concreto, sino que tambien cabe la posibilidad de encontrarse con niños que realmente necesitan un apoyo adicional más "insistente" que puede ser favorable realizar fuera del aula, por tanto cada caso debe ser estudiado por el equipo técnico y actuar en relación a lo mas conveniente para el alumno. Al mismo tiempo, hay que ser conscientes de los recursos reales del centro respecto al apoyo y tener en cuenta el número de profesores o voluntarios disponibles para este tipo de servicios.


Dicho todo esto, yo estoy a favor del apoyo dentro del aula mientras que este apoyo no sea demasiado "intrusivo". La existencia de apoyo dentro del aula puede llegar a aportar valores muy positivos, pero creo que también puede ser negativo hasta cierto punto. Si un profesor de apoyo que se encuentra en el aula sólo atiende a determinados alumnos los diferencia del resto de la clase, causando el mismo efecto que se lograría sacando al chico/a fuera del aula. En este caso, estos alumnos con necesidades pueden sentirse igualmente diferentes al resto aunque la ayuda se les ofrezca en la misma clase donde están el resto de sus compañeros.


Yo defiendo un apoyo igualitario pero individualizado, que permita al alumno con necesidades avanzar sin frenar a sus compañeros y viceversa. Un apoyo para todos, porque en mayor o menor medida todos los alumnos lo necesitan de algun tipo, y que le permita al alumno el derecho a ser diferente y a tener distinto ritmo de aprendizaje que el resto de las personas.


What do you think about it?


Carmen Amores Medianero